Le Jura en Espagne? Así titula Vincent Pousson (todo un experto en el mundo del vino) una entrada en su blog “Idées liquides & solides” donde habla de nuestro Capricho de Merenzao.
Aquí podéis leer lo escrito (en francés): http://ideesliquidesetsolides.blogspot.com.es/2012/06/le-jura-en-espagne.html
¿Se os escapa el idioma? ¡No hay problema! Aquí la traducción:
“No, no, ¡os aseguro que no he perdido el mapa! He encontrado un trocito de Jura (región vinícola) en España. En Galicia, concretamente a lo largo del Sil, este río esconde un lazo “azul pato” en el fondo de un valle espectacular que recuerda el del Douro, pero este es más salvaje. Ya os he comentado el asombroso patrimonio vinícola de esta extraordinaria región, río arriba en el Bierzo. Hoy, estamos 110 km al este, en Castro Caldelas, en las terrazas de la Ribeira Sacra, una de las denominaciones de origen mágicas de este país del fin del mundo, tierra de vinicultura heroica.
El encuentro “jurásico” se produjo anoche –aquí comenta lo que preparó de cena-. En lo que respecta al vino, un excelente Riesling Geisberg 2008, Un Grand Corbière Rosé 2009 del Clos Perdus, y ese gran desconocido, ese rojo luminoso cargado de todos los misterios, cristianos o paganos de Galicia, que me recomendaron “oxigenar” antes de servir.
La oxigenación es indispensable. Ya que este vino del 2008 que es por decirlo de una forma una “prueba” que no conoció jamás el barril sino la cuba, fue marcado por la reducción. Al abrirlo, es una evidencia, hay que ser gilipollas para beberlo así, dos o tres horas más tarde, el olfato se deshace de esas notas de “perro húmedo” y se convierte en mucho más atrayente, con, sorprendentemente, un vago perfume de marihuana verde. La boca se convierte inmediatamente en una intensa sensación de felicidad, llena de un fruto crujiente, maduro, pero vivo, con mucho centro de pureza aromática.
(….)
Este vino del que la originalidad no es la menor de sus cualidades estaba anoche muy cómodo con el couscous… –comenta lo bien que combinó con la cena. En fin, un tinto delicioso como el que nos gustaría encontrar más a menudo en España, al contrario de los “fenómenos de feria” de los años 2000.
¿Y a qué viene el Jura en todo esto? Simplemente a que este vino está compuesto de un 85% de trousseau, merenzao que se dice en Galicia y bastardo también, que se asemeja más bien al portugués. No es un capricho del vinicultor viajero deseoso de surfear sobre la actual moda de los vinos del Jura. La huella de la llegada del trousseau al extremo oeste de la península ibérica, se pierda en el amanecer de los tiempos (de todos modos, los monjes son altamente sospechosos, como en el caso del Albariño, en el origen de la introducción del trousseau en Galicia. Les damos las gracias. ¿Capricho? Capricho de Merenzao, es por tanto el nombre de esta rara cosecha producida por Ponte da Boga. Una botella que me trajeron la semana pasada el que quiso el capricho de aislar este jugo destacado, Dominique Roujou de Boubée, el Flying winemaker español, que oficia en Ponte da Boga entre otras, Galicia siendo el país de corazón de este alumno de la facultad de Bordeaux. Desde el 2008, la crianza de esta cosecha ha evolucionado. Tengo en la bodega una botella del nuevecito del 2010 y no os oculto que el sacacorchos me llama…”.
Muchas gracias, Vincent.