¡La noche meiga se acerca!


En la noche del 23 al 24 de junio casi ningún gallego pisa la cama hasta que la madrugada haya ardido lo suficiente y el humo se haya instalado sin permiso en nuestra primera, segunda y tercera piel.
Y es que la llegada del verano se tiene que celebrar al calor de una buena hoguera en la que se quemen tanto sardinas como malos recuerdos echando mano de rituales que ya utilizaban los Celtas mucho antes de que se inventase el mechero.
La noche de San Juan es la “noche meiga” por excelencia en Galicia donde la gente se reúne en playas, descampados… o incluso en las calles o plazas para celebrar una fiesta en la que no falta buena comida: las ya nombradas sardinas pero también pueden ser sustituidas por churrasco con su chorizo y vino del país. Lo cierto es que si en esta noche cogiésemos un helicóptero y sobrevolásemos la comunidad, la vista sería fantástica: miles de diminutos puntos extendidos en todas las direcciones.
Se dice que en San Juan, “meigas y brujas huirán” pero, ¿qué podemos hacer para que esto se cumpla? ¿Cuáles son los rituales más conocidos?
Los ritos: “haberlos haylos”
Las “cacharelas” (hogueras) deben ser encendidas pasada la media noche. Saltar una de éstas 9 veces (o cualquier número, aunque siempre impar) nos dará buena suerte para lo que reste de año.
En la playa de La Lanzada, en Pontevedra, es habitual recibir también 9 veces el impacto de las olas del mar en nuestro cuerpo, sobre todo si somos mujeres y queremos aumentar nuestra fertilidad.
Otro de los rituales consiste en lavarse la cara con las llamadas “hierbas de San Juan”  recogidas esa misma noche y dejadas en agua para, a la mañana siguiente, lavarse la cara con ellas. Acostarse con un manojo de estas hierbas hacía que al despertarse, se supiera la identidad de la futura pareja. Frotarse la piel con el rocío de la mañana o echar sal por encima de los tejados nos protegerá de los malos espíritus.
¿Cómo se vive esta noche en Galicia?
En unas ciudades con más implicación que en otras. Por ejemplo, es famosa su celebración en la ciudad de A Coruña donde esta fiesta ha logrado convertirse en Fiesta de Interés Turístico Nacional y, a partir de 2013, día no laborable.  La ciudad y los forasteros que se acercan hasta ella salen en masa a la calle pero, sobre todo, a las playas de Riazor y Orzán donde la línea que separa el fuego (ya no la arena) del mar se hace casi invisible. ¡Un verdadero espectáculo!. Además, desde Las Esclavas se lanza un gran concierto de fuegos artificiales y a esto se le une alguna que otra verbena en los alrededores y en muchos de los barrios.
En Ourense, junto con la festividad de San Silvestre, es la noche en la que las brujas actúan con mayor intensidad, de ahí que la reunión de éstas y los aquelarres se hagan esa noche en santuarios como el de O Corpiño. En muchas de las casas de las chicas jóvenes se colocan adornos y árboles frutales que tienen diferentes significados según su tipología. Por ejemplo, si coloca el garbanzo “es muy salada”, si coloca romero indica que es “buena chica”. Cuando la planta no es del agrado de la chica, ésta se levanta con el alba y la retira para evitar habladurías.
Dice la tradición que las hierbas se dejan en agua, pues durante esa noche se abre el cielo y las plantas adquieren virtudes medicinales. Así, en Rubiás dos Mitos empleaban las hierbas recogidas por la noche en curar las enfermedades, y en Amoeiro usaban las hojas de nogal para combatir la caída del pelo. En Entrimo los chicos y chicas chapotean en los riachuelos y las fuentes para alejar las enfermedades, al igual que en el río Támoga, en Nocelo do Val, en Castrelo do Miño y en Sande.
La Queimada
Cualquier ocasión es buena para preparar una buena Queimada, sobre todo durante esta noche con un buen conjuro. En el conjuro de la Queimada se invoca a los 4 elementos (fuego, tierra, agua y aire), deidades fundamentales de la cultura de los druidas y de los ritos célticos, todos quedan simbolizados en el ritual aunque el fuego el elemento clave:
EL FUEGO: Deidad de la purificación.
LA TIERRA: Simbolizada por el pote de barro da Queimada.
EL AGUA: Simbolizada con el aguardiente.
EL AIRE: Sobre el cual se elevarán y danzarán las llamas.
Tan importante como el rito y el famoso conjuro contra las meigas es que el aguardiente sea de gran calidad, sino no lograremos que toda esta mágica mezcla de aguardiente, azúcar, fruta y granos de café arda bien. También debemos hacerla al aire libre y de noche, viendo como se va apagando poco a poco la llama azulada que le da el azúcar.