A última hora del día de ayer saltaba la noticia en los diarios digitales: la Policía Nacional detenía a un extrabajador de la Catedral de Santiago como supuesto autor del robo del Códice Calixtino. Este libro del S.XII, de valor incalculable, desaparecía hace casi un año sin ninguna pista de la caja fuerte del archivo donde estaba guardado y a la que sólo tenían acceso el deán, José María Díaz y dos investigadores. Esta desaparición tuvo repercusión mundial, incluso, se activó una alerta internacional entrando en la investigación la mismísima Interpol.
Ayer se arrojaba algo de luz sobre el caso con el arresto de un hombre. El detenido realizó en su día labores de mantenimiento eléctrico durante años hasta que fue despedido por la Iglesia. Su esposa e hijo han sido también detenidos como presuntos cómplices del robo. Los agentes habían realizado varios registros en algunas de las propiedades de la familia situadas en O Grove y Negreira en las que se han topado con monedas y vestigios procedentes de la Catedral así como una «elevadísima suma de dinero», según ha informado la agencia EFE.
¿Por qué las investigaciones apuntaron hacia el extrabajador?
Según el diario El País, la mala relación de este hombre con el deán levantó las sospechas. Podría haberlo hecho por venganza personal puesto que en la regularización de los puestos de trabajo de los empleados de la Iglesia él resultó mal parado. Durante En todo este tiempo de investigaciones, el deán ha realizado enigmáticas declaraciones públicas en las que advertía que el objeto estrella del templo no podía andar muy lejos. Tan pronto como trascendió la desaparición, manifestó: «Si sospecho de alguien no lo digo, primero, porque es pecado hacer juicios temerarios y, en este caso, y si es un juicio temerario interior para este fin puedo formularlo pero nunca manifestarlo. El que se lo llevó, sabía de qué se trataba, de su incalculable valor y cómo llegar a él».
Aunque sí que se ha encontrado al supuesto ladrón, el libro todavía no ha aparecido y el arrestado no ha mostrado voluntad de colaborar.
¿Cuánto vale el Códice?
Aunque el extrabajador podría haberle puesto un precio de 40.000€, cantidad que coincide con la deuda que, supuestamente, la Catedral tiene con él por los trabajos realizados, esta joya tendría un valor incalculable.
Es un libro de viajes que nació con el objetivo de propagar la devoción por el apóstol Santiago. Una especie de guía para los peregrinos que se dirigían a la ciudad, con consejos, posibles alojamientos, descripciones de la ruta, de las obras de arte así como de las costumbres locales de las gentes que vivían a lo largo del Camino. También contiene ricas ilustraciones y 22 piezas polifónicas que se cuentan entre las más antiguas de Europa. Mide 30 por 21 centímetros y consta de 225 folios de pergamino. Aunque contaba con una réplica, el original, sólo se mostraba al público en grandes ocasiones.
Llama la atención que a pesar de estar guardado en una zona protegida con un sistema de alarmas y cinco cámaras de seguridad no hubiese saltado ninguna ante el robo. También es cierto que ninguna de esas cámaras apuntaba directamente al libro. La tecnología es una herramienta al servicio de la inteligencia.