Ante esta pregunta parece que solo existe una posible respuesta, así, a bote pronto… ¡¿la posición?!. Evidentemente que no. La dirección no tiene nada que ver entre estos dos términos, al menos, no estrictamente…
La cata horizontal
«Los consejos reguladores de las denominaciones de origen tienen como principal función la de ejercer el control de calidad en las bodegas de una región determinada, para que las botellas que salgan al mercado con la etiqueta que identifica una región, reúna todas las características organolépticas (propiedades de las sustancias que hacen que puedan ser apreciadas por los sentidos) obligatorias y típicas del prestigio de los vinos del lugar (terruño)»
En este tipo de cata los vinos que se prueban son de la misma añada, habitualmente de la misma zona y de idéntica variedad de uva. Este procedimiento también lo realizan los distribuidores que compran vino a pie de cuba para su posterior embotellado y de cuya cata saldrá el precio final.
La cata vertical
En este segundo tipo se catan vinos de una misma bodega o denominación pero de distintas añadas o cosechas y se suele completar con controles químicos. Gracias a estas catas se puede comprobar la evolución de los caldos y/o analizar la necesidad de posibles cambios en los métodos de vinificación.
Así que la diferencia entre una y otra es muy sencilla, para saber si estamos ante una horizontal o vertical tenemos que fijarnos, sobre todo, en la añada:
-Horizontal: vinos diversos de la misma añada y denominación de origen.
-Vertical: vinos de la misma bodega o denominación pero de diferentes añadas.